El arquitecto estrella anglo-ghanés David Adjaye tiene una visión para el Museo Edo de Arte de África Occidental en la Ciudad de Benín, Nigeria. Quiere sumergir a los visitantes en los objetos y a la vez “deshacer… la cosificación” del arte africano desde la perspectiva occidental. Pero incluso antes de poner el primer ladrillo de la estructura de tres pisos, se excavará el sitio del proyecto y otras partes de la ciudad, una iniciativa de USD 4 millones que se espera iniciar este año.
El edificio se ubicará encima de ruinas de la capital del Reino de Benín, saqueado por los ingleses en 1897. Los arqueólogos, que trabajan con el Museo Británico, desenterrarán partes de la ciudad destruida y los artefactos descubiertos se guardarán en el museo, ubicado casi en el mismo lugar.
El equipo también busca recuperar miles de artefactos, incluidas placas de bronce que retratan la poderosa historia del reino. Conocidas como los Bronces de Benín, las piezas se encuentran repartidas por varios museos del mundo como trofeos del despojo colonial. Francia y Alemania se han comprometido a devolver los que tienen en su poder, mientras que el Muso Británico, que posee la mayor colección del mundo, podría prestar los bronces para la exhibición.
Con el apoyo del socio del proyecto Legacy Restoration Trust, la nueva estructura será diseñada según la arquitectura tradicional de Benín e incluirá partes del sitio histórico, lo que incluye murallas restauradas, fosas y puertas de la antigua capital. Árboles nativos darán sombra al jardín público y habrá un espacio educativo y una galería dedicados al arte contemporáneo de África Occidental.
Al incorporar la arqueología en el diseño del proyecto, el museo destaca la forma en que el pasado informa el presente —y ofrece a los visitantes una oportunidad de apreciar verdaderamente la cultura de la Ciudad de Benín.